i d e n t i d a d
Estos retratos representan como nuestra percepción de los demás y especialmente de nosotros “mismos” tiende a estar muy distorsionada.
Hay una sensación vaga de como experimentamos; independientemente de lo convencidos que estemos de nuestra narrativa. Nuestro juicio suele estar coloreado por emociones porosas e inestables que cambian cada instante. En la oscuridad, o en el fondo de nuestra arquitectura cognitiva hay corrientes subterráneas con estados de ánimo vaporosos y patrones elusivos que determinan mucho de cómo hacemos sentido de la realidad.
En ésta serie me interesó explorar la indeterminación como el estado natural de la subjetividad y los fenómenos. Quizás se pueda “ver” con “claridad” esta forma imprecisa de realismo interno.

